La Policía Local de Palma encierra a los perros de la Unidad Canina en sus jaulas para dejar sitio al depósito municipal de vehículos de Son Toells.
A primera hora de la mañana de este martes, varias grúas irrumpieron en la pista de entrenamiento de los agentes caninos y comenzaron a depositar coches y furgonetas abandonados en el lugar.
Acto seguido, los responsables de la unidad se vieron obligados a encerrar a los animales. A partir de ahora, los agentes caninos tan solo podrán salir a pasear cuando sus guías los saquen y su espacio de recreo queda limitado a un trozo de asfalto sin sombra. Se trata de toda una declaración de intenciones. Desde hace meses, la Jefatura está barajando el cierre definitivo de la Unidad Canina.
Desde hace meses, la Policía Local de Palma sólo retira coches abandonados de las calles en contadas ocasiones. La falta de espacio en el depósito municipal se ha convertido en una pesadilla para el consistorio palmesano.
En 2018, un particular interpuso una denuncia ante el Seprona (Servicio de Protección de la Naturaleza) de la Guardia Civil informando de que el depósito de coches de la Policía Local de Palma (Son Toells) estaba cometiendo varios delitos medioambientales.
La denuncia señalaba que «el denunciante afirma que en la zona conocida como s'Indioteria, polígono 7, parcela 23, del término municipal de Palma, existe un almacenamiento de vehículos en estado de desguace y chatarra que provoca vertidos de aceites y otros residuos contaminantes. Los mismos se producen en terreno rústico».
En su día, el SEPRONA detectó graves anomalías medioambientales e informó a Cort para que las subsanara.