Agentes de la Policía Nacional han detenido a una mujer de 41 años de edad, como presunta autora de la sustracción de oro del establecimiento donde trabajaba.
El Grupo de Policía Judicial de la Comisaría Distrito Oeste procedió a la detención, el pasado miércoles, de la única empleada de una tienda de compra venta de metales preciosos que desde inicios de 2017 fue intercambiando lotes de metales preciosos por otros de menor valor.
El dueño del establecimiento alertó a la Policía Nacional cuando una importante empresa de fundición de oro detectó que ciertos paquetes de supuesto oro contenía metales de bajo valor para fundir. Al revisar el estado de cuentas se cercioró que su empleada había estado introduciendo piezas de supuesto oro por otras de menor valor, entregando el preciado metal a su expareja, quien lo revendía en otros establecimientos.
El propietario reconoció numerosas joyas catalogadas en su comercio vendidas en otros de la competencia. Tras un minucioso estudio de la contabilidad se detectó que la trabajadora había falseado los cheques bancarios para aumentarse el sueldo y que alteraba el pesaje de lotes de piezas adquiridas con el fin de «cuadrar» cuentas y poder sustraer poco a poco partes de los lotes. Ante la recriminación del empresario de lo sucedido a su empleada en su ultimo día laboral ésta negó todos los hechos y manifestó sentirse muy estresada
La expareja de la detenida, un hombre de 43 años, también fue detenido como presunto autor de un delito de hurto por vender parte del oro que le entregaba la mujer.
El hombre quedó en libertad con cargos mientras que la mujer pasó a disposición judicial este jueves.
En un principio el importe del oro denunciado asciende a alrededor de 65.000 euros, si bien la investigación continúa abierta y los investigadores creen que puede superar los 100.000 euros atendiendo a la suma total de las joyas, lotes de oro, cheques y descuadres en la contabilidad.