Un juez federal de Nueva York rechazó este jueves por riesgo de fuga la petición de libertad bajo fianza del millonario Jeffrey Epstein, que pedía esperar al arranque del juicio en su contra por tráfico de sexual de menores en su casa de Manhattan.
El magistrado Richard Berman explicó durante la vista oral celebrada este jueves que el riesgo de que Epstein se fugue imposibilita su petición de esperar al juicio en su hogar del exclusivo barrio del Upper East Side, afirmando también que el millonario supone un potencial peligro para el público de salir de prisión.
«Creo que la Fiscalía ha demostrado un peligro para otros y la comunidad con pruebas claras y convincentes», dijo el juez, quien también dudó que «una fianza pueda superar un peligro a la comunidad». Para sostener su afirmación, Berman puso sobre la mesa el testimonio de dos de las víctimas -Annie Farmer y Courtney Wild- que el pasado lunes hablaron durante la vista oral para decidir sobre la fianza de Epstein, una resolución que finalmente el juez retrasó a este jueves.
«Tenía 16 años cuando tuve la desgracia de conocer a Epstein. Él fue inapropiado conmigo. Fue inapropiado conmigo en dos ocasiones», afirmó Annie Farmer, que estaba sólo a pasos del acusado en la sala del tribunal y que dijo que prefería no entrar en detalles.
El juez tuvo en cuenta «la gran riqueza y sus muchos recursos», como un avión privado o residencias en París y Arabia Saudí.
Otros motivos del juez para rechazar la moción fueron la posesión de fotos sexualmente explícitas o un pasaporte austríaco caducado con el rostro de Epstein pero no con su nombre que fue utilizado en la década de los ochenta para repetidos viajes a Arabia Saudí.
Berman destacó asimismo que Epstein habría pagado recientemente a testigos en potencia en su contra y que el millonario no había cumplido con los requerimientos para los agresores sexuales registrados.
La fiscalía se había opuesto a la petición de un arresto domiciliario en su mansión del barrio neoyorquino, resguardado por su equipo privado de seguridad, afirmando que buscaba un tratamiento especial en una «jaula de oro».
Martin Weinberg, abogado de Epstein, había asegurado que su cliente estaba dispuesto a pagar la cantidad que decidiera la corte, incluso hasta 100 millones de dólares, aunque aclaró que no es tan rico como se dice.
El millonario, que se puede enfrentar hasta 45 años de prisión, había ofrecido como garantía su mansión en el Upper East Side, así como su avión privado.
Sin embargo, seguirá en una prisión federal de Manhattan, una de las más seguras del país, en donde se encuentra desde el pasado 6 de julio cuando le arrestaron al aterrizar su avión en el vecino estado de Nueva Jersey.
Red de abuso de menores
Epstein fue acusado de tráfico sexual de menores por la Fiscalía del distrito sur, que alega que creó una red para abusar de decenas de niñas en su mansión de Nueva York, así como en otra situada en Florida, hace más de una década.
El magnate ya se enfrentó a acusaciones de esta índole en Florida, pero en 2008 alcanzó un acuerdo extraoficial con la Fiscalía para que se cerrara la investigación, que lo pudo haber enfrentado a cadena perpetua, pero sólo cumplió 13 meses de cárcel y alcanzó un acuerdo económico con las víctimas.
El trato fue supervisado por el entonces fiscal de Miami, Alexander Acosta, que fue nombrado posteriormente secretario de Trabajo del Gobierno de Donald Trump, y que se vio obligado a renunciar en medio de las críticas luego de que Epstein fuera arrestado por segunda ocasión.