Unas mujeres increparon en los juzgados de Manacor al profesor de judo detenido por presuntos abusos sexuales a al menos once alumnos, en la zona del Llevant de Mallorca, durante los últimos 20 años. El hombre llegó al edificio judicial custodiado por tres agentes de la Guardia Civil, con las manos esposadas por detrás, sobre las 10.30 horas de este jueves. El sospechoso, de 43 años, negó ante el juez los tocamientos a los menores y aseguró que es cariñoso y que mantenía una «relación especial» con algunos.
La fiscal Lidia del Valle pidió el ingreso en prisión del profesor de judo para proteger a las supuestas víctimas, evitar la destrucción de pruebas y que cometa más abusos. El Juzgado de Instrucción número 1 de Manacor, en funciones de guardia, no compartió el razonamiento de la representante del ministerio público y decretó la libertad provisional para el hombre, asistido por el abogado Eduardo Luna.
La decisión generó malestar entre los investigadores de la Guardia Civil, ya que esperaban que lo enviara a la cárcel. El juez Javier Burgos, que sustituyó este jueves a la titular de Instrucción 1, le retiró el pasaporte y le impuso comparecencias cada 15 días en el juzgado.
El magistrado le imputa varios presuntos delitos de abuso sexual. La mayoría de chicos tenían entre 11 y 14 años cuando ocurrieron los hechos.
La primera denuncia se interpuso en la Fiscalía de menores en 2016, pero quedó archivada por falta de indicios. Los investigadores sostienen que el profesor de judo, que carece de licencia, realizó tocamientos a los menores durante los entrenamientos y también en su casa, donde invitaba a dormir a algunos adolescentes.
Los regalos que recibían los jóvenes (smartphones, viajes e incluso una moto) llamaron la atención de los Servicios Sociales, que han colaborado con la Guardia Civil de forma activa.
El acusado, en la actualidad, daba clases en un espacio que le había cedido el Ajuntament de Son Servera en el polideportivo y en otro local de pensionistas de Cala Millor.
Federación Balear
La Federación Balear de Karate condenó este jueves los supuestos abusos sexuales a través de un comunicado. «Queremos dejar muy claro que la federación obliga a disponer de la titulación oficial a los profesores y clubes». Los profesionales presentan un certificado de antecedentes por delitos sexuales. La federación recomienda a los padres de alumnos que comprueben la procedencia de los profesores solicitándoles la documentación oficial.