En el solar frente a la urbanización de Son Güells hay un piso piloto derribado. Los restos de lo que fue una vivienda okupada se amontonan frente a la urbanización recién construida. Las familias de okupas han regresado al lugar después de que el Ajuntament de Palma ordenase a la Policía Local que los desalojara a finales del pasado abril. Han roto los precintos y se han vuelto a instalar. La indignación entre los vecinos crece porque molestan y son personas conflictivas que generan inseguridad entre los residentes, que han puesto numerosas quejas.
«Canallas»
Un hombre vestido con camisa de manga corta de flores, bermudas azul marino y chanclas acude al percatarse de la presencia del periodista y el fotógrafo en la zona. «Qué canallas sois los periodistas», dice varias veces el pasado jueves por la mañana.
«Por aquí ha pasado un huracán», bromea antes de empuñar un Huawei para grabar y encararse con los reporteros. La mujer del okupa acude y el hombre le pide que avise «a los otros» para ahuyentar a los periodistas y conseguir que se marchen.