La Fiscalía Anticorrupción ha abierto diligencias contra el sindicato policial SPPME por airear datos de seguridad de la regidora de Seguretat Angélica Pastor durante la última sesión plenaria celebrada en el Ayuntamiento de Palma. En un momento dado, el portavoz sindical y ante toda la corporación municipal, público y medios de comunicación, realizó una serie de ataques de índole personal contra la regidora. Durante su intervención, Juan Dato del SPPME, enumeró una serie de datos muy sensibles en materia de seguridad. Cámaras de seguridad, vehículos, horarios de la regidora etc... Este hecho indignó a los servicios de seguridad y protección de autoridades.
La reacción no se hizo esperar y los hechos fueron rápidamente denunciados ante la Fiscalía Anticorrupción. Tras el incidente, la regidora Pastor informó a sus compañeros de consistorio de los incidentes que ha tenido que sufrir estos años.
«Vivo con unas medidas de seguridad muy incómodas y que no deseo a nadie. La evaluación de riesgo realizada por la Policía Nacional y la Guardia Civil es alta. Las medidas de protección son básicas porque no quiero que mis hijas, de 6 y 8 años tengan que vivir con un guardaespaldas en el colegio o cuando salgan a la calle», comentó Pastor.
Hasta la fecha no se habían hecho público unos incidentes muy graves que ha sufrido la máxima responsable policial de Palma. En su vivienda de Felanitx, unos desconocidos accedieron al interior de la misma y le dejaron un anónimo.
En otra ocasión, al coger el coche de su padre para ir a trabajar, se lo habían destrozado. Todos estos hechos fueron denunciados en su día ante los agentes de la Guardia Civil quienes tomaron huellas e iniciaron una exhaustiva investigación.
Una vez en Palma, hasta en cuatro ocasiones, una cámara de seguridad registró la entrada de un desconocido encapuchado al interior del garaje de su vivienda intentando forzar el coche particular de la regidora.
«Estamos hablando de un sindicato que se ha querellado dos veces y que ambas han sido archivadas. El mismo sindicato que me grabó en mi despacho sin mi consentimiento. Ya está bien. Son gentuza», concluye Angélica Pastor.