La Policía Nacional ha atribuido un delito de apropiación indebida a un hombre de 50 años residente en Mahón por la venta de joyas que localizaba en las playas de la isla utilizando un detector de metales.
La investigación se inició cuando los agentes detectaron la venta de varios lotes de joyas, en su mayoría anillos con inscripciones de texto y fechas, que al parecer no tenían ninguna relación con la persona que las vendía.
La Policía Nacional de Mahón comprobó que las joyas habían sido localizadas por el individuo en diversas playas, no cumpliendo con la obligación de depositar los objetos hallados en dependencias oficiales para que pudieran ser reclamados por sus propietarios en el plazo de dos años, tiempo tras el cual pasarían a ser de su propiedad.
Las joyas, por las que el hombre obtuvo un beneficio cercano a los 4.000 euros, han quedado en custodia y a disposición del juzgado donde ha sido remitido el atestado policial.