La madre de la joven Romina Celeste Nuñez, cuyo cuerpo busca la Guardia Civil en Lanzarote tras declarar su marido que lo tiró al mar después de encontrarla muerta, ha afirmado hoy que todavía tiene la esperanza de que le digan que su hija está viva.
En conversación telefónica desde Paraguay con la Radio Autonómica de Canarias, Míriam Rodríguez ha afirmado que desde el domingo espera una noticia que le diga que su hija no ha fallecido, porque «a una niña tan linda no le puede pasar esto».
A la espera de la noticia no logra conciliar el sueño: «Siento que, si duermo y me entra la llamada de mi hija, puede que no la sienta», afirma la mujer, que cuida del hijo de cuatro años de Romina Celeste.
Señala que el niño no sabe nada, porque no lo entendería, y de la relación de su hija con su marido, y sospechoso de la desaparición, señala que a él se le veía cariñoso y detallista con su hija. «No entiendo si hizo lo que dicen que hizo», reconoce.
Romina Celeste era la mayor de cuatro hermanos y el próximo mes de marzo cumpliría 29 años, según manifiesta su madre, que comenta que otra de sus hijas, embarazada de cuatro meses, casi pierde ayer el bebé por culpa de los comentarios en las redes sociales.
Míriam Rodríguez comenta que le ha otorgado un poder a una hermana suya que está viajando hacia Lanzarote para estar presente en las investigaciones.
Romina Celeste Núñez Rodríguez desapareció en Costa Teguise, en Lanzarote, hace dos semanas, y su marido ha sido detenido como sospechoso de su desaparición.
Raúl D.C. ha manifestado a la Guardia Civil que encontró muerta a su mujer y, después de tener el cuerpo varios días en la casa, intentó quemarlo y luego lo arrojó en varios puntos del litoral.