Pedro lleva más de 35 años bajando la bandera del taxi 786 en Palma. Es una persona amable, educada y le gusta eludir polémicas. Atiende nuestra llamada por deferencia, pero prefiere seguir manteniendo su anonimato como hasta la fecha. En la madrugada del pasado viernes, cuatro jóvenes le propinaron una paliza en Cala Major, en lo que fue un asalto a taxistas en Palma.
«Recuerdo que recogí a cuatro chicos jóvenes que tenían buena presencia. Por la forma de hablar eran dominicanos o venezolanos. Cuando llegamos al final del destino, en la calle Bartomeu Quetglas, sin salida, tres de los cuatro chicos salieron del vehículo y uno de ellos me dio un billete de 20 euros. La sorpresa fue mayúscula cuando me cogió del cuello por detrás y me dijo, textualmente: ‘Lo siento mucho, pero te vamos a atracar'», relata el taxista agredido.
Los otros jóvenes abrieron las puertas y el chófer comenzó a recibir golpes por todas partes. Le propinaron puñetazos en el abdomen, que le dejaron casi sin respiración. Mientras el taxista seguía aturdido, uno de los ladrones le arrebató la recaudación y el móvil y a continuación huyeron a la carrera.
«Afortunadamente estoy bien. Soy una persona bastante tranquila, en los más de 35 años que llevo trabajando en el taxi de noche jamás había tenido ningún problema. He recibido el apoyo de todos mis compañeros, el teléfono no para de sonar. El día de los hechos, cuando se avisó a la Policía Local de Palma, tardaron más de 25 minutos en llegar y cuando lo hicieron, sin ninguna prisa, me dijeron que no podían hacer nada y que tenía que denunciar en la Policía Nacional. Cuando llegué a la Policía Nacional todo fueron facilidades y un trato exquisito. que se agradece en esos duros momentos. Les estoy agradecido».