La Policía Nacional de Burgos ha hecho entrega de 2.800 euros a un vecino, tres años después de que éste se encontrara casualmente dicha cantidad en su centro de trabajo y no hubiera sido posible dar con el propietario del dinero, según informaron a Europa Press fuentes policiales.
Los hechos se remontan a febrero de 2015 cuando un hombre se presentó en la Comisaría de la Policía Nacional y entregó 2.800 euros, dinero que había encontrado en su lugar de trabajo.
Concretamente, cuando se encontraba en la línea de producción de la fábrica donde trabajaba, el operario localizó unas bolsas de plástico adheridas a unos barriles con la cantidad de dinero mencionada, por lo que decidió hacer entrega de ello en dependencias policiales.
La Policía Nacional realizó gestiones con los almacenes de distribución que suministraban el material a la fábrica, sin que hasta la fecha se haya tenido conocimiento de la procedencia del dinero.
Transcurrido el tiempo legal, y sin que se haya podido localizar al legítimo propietario del dinero encontrado, la Policía Nacional de Burgos ha entregado los 2.800 euros al ciudadano que los encontró.