La Policía Nacional ha alertado a los comerciantes de la presencia de falsos revisores, de compañías de telecomunicaciones o suministros, que acuden a los establecimientos para obtener información que facilite un robo posterior.
En concreto, los agentes están informando a asociaciones de comerciantes y en establecimientos como joyerías, estancos, administraciones de loterías, bancos o peleterías de este nuevo procedimiento, informa la Dirección General de la Policía.
Respecto al modus operandi, la Policía explica que los delincuentes visitan los comercios haciéndose pasar por técnicos de telecomunicaciones o suministros y para ello alegan una revisión de la instalación, comprobaciones rutinarias o supuestas averías.
Con el fin de no levantar sospechas, se disfrazan de personal técnico con uniformes y hasta falsas acreditaciones de las compañías que dicen representar.
Además, aprovechan la visita para cortar la comunicación entre la central de alarmas y el establecimiento, de manera que impiden que se genere el aviso a la Policía el día del robo.
Pero el verdadero fin de la inspección es estudiar los sistemas de seguridad del local comercial y de las fincas colindantes, para posteriormente realizar un robo, generalmente mediante un butrón.
A través de un folleto informativo que entregan en los locales, los agentes recomiendan extremar precauciones ante visitas inesperadas de técnicos, comprobar la acreditación que portan y cotejar con la compañía la veracidad de la visita.
Tampoco se debe informar a desconocidos sobre los sistemas de seguridad del establecimiento y si se cuenta con grabación de imágenes, lo mejor es realizarla en un disco duro no localizable.
Igualmente recomiendan instalar un sistema de alarma sonora con línea telefónica protegida, no visible y separada del resto de líneas, así como retirar el dinero en metálico del local con la mayor frecuencia posible para evitar almacenarlo allí.
En caso de detectar una visita fraudulenta, los agentes aconsejan a los comerciantes que avisen inmediatamente a la Policía.