El auto de prisión de Bartolomé Cursach y Bartolomé Sbert, cuyo contenido se ha comenzado a conocer este lunes, tras el levantamiento del secreto del sumario, refleja la supuesta preparación de un falso testigo y el seguimiento a empresarios para «provocarle» por parte de Sbert.
Según las conversaciones que se pueden leer en el auto, que consta de 452 páginas y cuyo sumario tiene 85 tomos, Sbert y un trabajador del grupo comentan cómo van los seguimientos: «Pues nada hazle una foto», le dice Sbert y el empleado le contesta «le hago la foto y te la paso».
En otro momento, enmarcado como el anterior en julio de 2016, cuando uno de los empresarios grabados anuncia a quien le está grabando de que ha avisado a la Policía, Sbert le dice que le diga que «están grabando a losrelaciones públicas ilegales, porque la policía sabe que hay un escrito en el Ayuntamiento de que él está grabando a los relaciones públicas para poner una denuncia cada día».
«Diles que tú estas grabando a los relaciones públicas ilegales y nada más. Vale ahora, ahora. La Policía ya sabe, la Policía tiene un escrito en el Ayuntamiento de la Policía que tu estas eh grabando los relaciones publicas. Y si te dicen quien te manda dices la empresa no digas quién», le dice Sbert al empleado, según las grabaciones recogidas en el auto.
Posteriormente, Sbert le comunica a este mismo empleado que grabe todo lo que ocurra en una reunión con un empleado de uno de los empresarios y que, además, quiere aportar como falso testigo de lo que decidan denunciar, «a uno de los vendedores de tiques que allí se encuentren».
Tras la reunión, el empleado llama a Sbert y le dice que ha hablado con un vendedor de tiques y que le ha pasado una foto de su DNI para que cuando haya juicio decir que tienen un testigo de lo ocurrido.
«Ya me ha dado una fotocopia por Whatsapp de su DNI para cuando haiga el juicio un momento dao pa' decirle que tenemos un testigo y esto (...) que me han amenazado (sic)», recogen las grabaciones transcritas en el auto de manera literal.