El Secretariado del Pueblo Gitano nacional se personará y ejercerá de acusación particular contra el dueño de la piscina de Bunyola por impedir la entrada al recinto de gitanos.
Manuel Alameda, presidente y portavoz de la Asociación para la Integración del Pueblo Gitano de Balears, contactó con sus homólogos nacionales y éstos, tras analizar el caso y escuchar las grabaciones, han dedicido poner su maquinaria judicial en marcha. En los próximos días, su gabinete se personará en la causa y aportará nuevas pruebas. Al margen de varios extrabajadores de la piscina de sa Font Seca, también se incluirá en la denuncia una grabación captada el mismo día del incidente.
En las últimos días el número de denuncias de afectados por un presunto delito de odio sigue aumentando. Será la Guardia Civil de Marratxí quien se hagan cargo de la investigación.
Extrabajadores –personal de mantenimiento y varios socorristas–, confirmaron que recibían instrucciones directas de no permitir la entrada a gitanos. Uno de los exporteros del recinto afirmó: «Llevamos años avisando a Toni de que lo que estaba haciendo era ilegal, pero no hacía caso».
El Ajuntament de Bunyola emitió la semana pasada un comunicado en el que condenaba cualquier tipo de discriminación. El Consistorio bunyolí dejó muy claro que la piscina en cuestión no es de gestión pública. «La denuncia presentada ante la Policía Local ya está tramitada y tras haberse identificado a las partes y reunida toda la información necesaria se traspasarán las diligencias a la Guardia Civil».