El bebé de siete meses que murió presuntamente por los malos tratos de sus padres falleció por un edema cerebral que le provocó una fractura de cráneo, según han informado a Efe fuentes judiciales.
El bebé estuvo ingresado en el Hospital Virgen Macarena de Sevilla desde el pasado lunes 12 de junio hasta que falleció el pasado sábado.
Tras la muerte del bebé, que fue prematuro y nació con un kilo y medio de peso mientras la madre estaba en la cárcel, el Instituto de Medicina Legal de Sevilla ha tomado muestras para realizar un análisis toxicológico y de histopatología y determinar con exactitud las circunstancias que provocaron su fallecimiento.
En este sentido, las fuentes han señalado que deben precisar las causas por las que el niño sufrió la fractura de cráneo, y han añadido que podría ser una lesión compatible con una caída al suelo.
El menor también padecía el síndrome del niño zarandeado, que provoca hemorragias en el fondo de los ojos, según las mismas fuentes.
La Policía detuvo la semana pasada en Sevilla a una pareja de 18 y 19 años acusada de los daños ocasionados a su bebé, que fue ingresado en estado crítico en el hospital.
El juzgado de instrucción número 9 de Sevilla ordenó el jueves el ingreso en prisión provisional comunicada y sin fianza del padre del bebé, que tenía numerosos antecedentes por robos, a la vez que puso en libertad con cargos y orden de alejamiento con respecto al bebé a la madre.