La Audiencia Provincial de la Sección número 2 de Palma califica en un auto de «persona peligrosa» al conductor que el pasado 29 de abril arrolló y mató al ciclista ibicenco Daniel Viñals y considera su actitud de «gravemente irresponsable» y «huidiza».
En el escrito, el Tribunal justifica el calificativo debido a su «incapacidad de respetar valores esenciales en toda convivencia, como son el respeto por la normas de circulación y la seguridad de sus usuarios».
El conductor, que este martes ingresó en prisión provisional y sin fianza, después de que la Audiencia Provincial estimara los recursos interpuestos por Fiscalía y familiares de Daniel Viñals, genera un «elevado grado de desconfianza» al Tribunal, según figura en el auto, que sí contempla el riesgo de fuga.
La Audiencia asegura que no se tiene constancia de que el conductor tenga un trabajo estable ni familia propia a su cargo: «Los que tienen verdadero arraigo son sus padres, pero no el apelado».
«Su misma juventud constituye un factor de peligrosidad equívoco», indica el auto, que explica también que si bien el conductor depende de los padres, «la circunstancia de no tener familia a su cargo favorece la posibilidad que pueda tomar la decisión de darse a la fugar para evitar ser juzgado y condenado».
Además, este riesgo de fuga también se da por las elevadas penas a las que se enfrenta que, según el auto, pueden alcanzar los nueves años: cuatro por el delito de omisión de socorro y cinco por la conducción temeraria con resultado de muerte y lesiones en concurso ideal.
Por otro lado, apunta que el hecho de que se haya retirado, de forma cautelar, el carné de conducir no implica que no exista la posibilidad de que vuelva a «protagonizar hechos similares».
En este caso, el Tribunal recuerda las otras dos sanciones anteriores por conducir bajo los efectos del alcohol y califica de «nulos efectos disuasorios» lo que estas sanciones provocaron en el conductor.
Así, en el escrito se indica que la retirada del permiso de conducir reduce el riesgo de reiteración, «pero no lo anula ni lo elimina absolutamente».
El Tribunal considera también que el conductor, ahora en prisión, padece una «problemática» de consumo de drogas y de alcohol, «que además asocia peligrosamente a la conducción de vehículos».
«La relación temporal próxima entre esas sanciones y los hechos presentes ponen de manifiesto una peligrosa progresión del recurrente en esa conducta de consumo asociada a la conducción, que hace que aún sin carnet el recurrente pueda volver a cometer hechos similares», apunta.
El Tribunal de la Audiencia Provincial destaca que no consta que se haya tratado ni superado la problemática del conductor con el consumo de drogas y alcohol y resalta el «menosprecio» al cumplimiento de las normas y por la vida ajena, así como «la nula capacidad para, a pesar de las sanciones anteriores, reflexionar y abandonar sus hábitos de consumo y conducción en tal estado», concluye.