Una dotación de la Guardia Civil detuvo este miércoles a un hombre de nacionalidad rumana acusado de haber realizado abusos sexuales de manera reiterada sobre su hija menor de edad.
La operación se desencadenó a raíz del testimonio de la hermana mayor de la víctima que el pasado martes al cuartel de la Benemérita de un municipio del norte de la Isla con la intención de denunciar que su hermana de 16 años de edad estaba siendo objeto de abusos sexuales por parte de su propio padre.
Según su testimonio, los abusos habrían empezado hace cuatro meses, coincidiendo con la muerte de la madre. Las primeras investigaciones del caso apuntan a que estos hechos habrían consistido en tocamientos en las zonas íntimas de la menor. Estos hechos se producían de manera regular en el domicilio familiar. La denunciante apuntó también que su padre se acostaba en la cama con su hija pequeña.
La Guardia Civil requirió la presencia de la joven, que confirmó en su declaración ante los agentes el relato que había explicado previamente su hermana mayor. Los investigadores no encontraron ningún tipo de evidencias que confirmen que el hombre investigado realizara ningún tipo de penetración a su hija menor de edad. El presunto pederasta negó en todo momento haber participado en cualquier tipo de práctica que pueda estar relacionada con un delito de abusos sexuales.