La Audiencia de Palma juzgará el próximo lunes a un acusado de un delito de lesiones para quien la Fiscalía pide una condena de 10 años de prisión por dejar tuerto a un hombre con el que había discutido en una discoteca del Paseo Marítimo, al romperle una copa de vidrio en la cara.
Los hechos que se juzgarán ocurrieron en la madrugada del 14 de diciembre de 2014, después de que agresor y víctima discutieran en la discoteca, sin llegar a pelearse porque los separaron sus respectivos amigos.
El agresor, que entonces tenía 20 años, sin mediar palabra y mientras el joven con el que había discutido hablaba con una amiga, se dirigió a él por la espalda y le estampó una copa de vidrio en la cara sin que pudiera reaccionar, según recoge el escrito de acusación de la Fiscalía.
A consecuencia de la agresión, el herido sufrió el estallido del globo ocular izquierdo, así como otras lesiones en la cara de las que tardó 121 días en curar.
A raíz del suceso, la víctima sufre una minusvalía del 14 % ya que perdió por completo la visión del ojo izquierdo, así como trastorno por estrés postraumático, síndromes psiquiátricos y un perjuicio estético relevante.
La Fiscalía solicita que el acusado de la agresión sea condenado a 10 años de prisión y a indemnizar a la víctima con 6.030 euros por las lesiones y con 124.134 euros por las secuelas, cantidad que deberá incrementarse un 20 % por ser lesiones de carácter doloso y un 10 % por factor de corrección, según el baremo previsto para lesiones permanentes.
El juicio será este lunes ante la sección primera de la Audiencia de Palma.