Uno de los dueños del bar donde se produjo la agresión en Nochebuena dice que no la vio. La camarera del local tampoco presenció la paliza. Los dos testigos declararon este miércoles en el juzgado de Instrucción número 4 de Palma. El juez envió a prisión al agresor el pasado sábado.
Los testigos explicaron que vieron que se rompieron unos vasos en el suelo y que el portero del local expulsó a la víctima. Los dos confirmaron que el vigilante tenía una marca en el cuello. Algunas personas que presenciaron el ataque explicaron que la víctima intentó cortar con un vaso al portero.
El detenido es un joven de 28 años con antecedentes. La agresión ocurrió de madrugada en un local de copas de la calle Pablo Iglesias. La víctima iba acompañada de su pareja. El hombre quedó herido de gravedad. Tuvo que ser trasladado al hospital en situación de colapso.
El Grupo de Homicidios de la Policía Nacional se hizo cargo de la investigación tras la denuncia interpuesta por la pareja de la víctima. Los agentes localizaron a varios testigos de la paliza. El viernes pasado consiguieron detener al sospechoso.
La víctima se encuentra fuera de peligro, según informó la Policía Nacional. El herido es el propietario de un bar cercano a los juzgados de Vía Alemania, en Palma.