La cocaína de Magaluf llegaba desde Marivent. El juez que investiga a la banda de dominicanos detenida en una operación conjunta de la Policía Nacional y la Guardia Civil en junio ha decidió procesar a 38 personas por su participación en la trama. El núcleo duro de la banda son dos ciudadanos dominicanos, uno de ellos apodado ‘el Salsa' y tiene ramificaciones en Palma, Marratxí y Can Picafort.
La primera pista que tuvieron los investigadores sobre la banda surgió de un club de alterne de Magaluf en el que se vendía cocaína. Su dueño, un ciudadano rumano cambiaba cada poco de coche de alquiler y siempre utilizaba a terceras personas para contratarlo. Además, usaba medidas de seguridad desproporcionadas.
Los seguimientos a los que se le sometió llevaron a los dos cabecillas dominicanos. A partir de ahí, una serie de escuchas telefónicas dieron a los agentes pistas sobre la red. Los narcos traían la droga a la Isla desde Barcelona, donde se ha detenido a una decena de personas y allí tenían un contacto de nacionalidad colombiana, conocido como ‘the Master'.
La red explotaba además un punto de venta muy activo en la calle Bartomeu Fons de Cala Major, a escasos 250 metros del palacio de Marivent. En ese mismo domicilio, la red tenía una serie de ‘pisos guardería' en los que se almacenaba y se preparaba la droga. El conserje de la vivienda está imputado ya que se le atribuye ser la persona que localizaba las viviendas vacías en el complejo y las ponía a disposición de la banda.