El centro penitenciario de Palma presenta un overbooking de policías por causas de corrupción. En los últimos meses, siete agentes de la Policía Local de Palma han ingresado en la cárcel palmesana acusados de actuar «de forma coordinada como una auténtica organización criminal, instalada de manera permanente en el delito, en sus múltiples y variadas manifestaciones», tal y como reza en el último auto judicial dictado por el juez Manuel Penalva.
Los siete arrestados, junto a dos policías nacionales -atraco de la Porciúncula- están ingresados en un módulo especial habilitado para la ocasión. La cárcel de Palma no dispone de módulo especial para funcionarios policiales. Por este motivo la dirección ordenó adaptar de manera provisional un ala del módulo de ingresos donde permanecen los nueve funcionarios policiales.
Por el momento, el comportamiento de todos ellos es correcto. Por razones de seguridad, los agentes no pueden ingresar con presos comunes para evitar que fuesen linchados.
La dirección del centro, no descarta solicitar a la jueza de Instrucción Penitenciaria la posibilidad de trasladar a los policías locales a cárceles de la Península en el supuesto caso de que aumenten el número de agentes encerrados en prisión provisional.