El Bisbat de Mallorca ha decretado el archivo de la investigación sobre las denuncias de abusos sexuales contra el ex rector de sa Pobla, Joan Pons, y por consiguiente el levantamiento de las medidas cautelares impuestas en su momento. El obispado informa en una nota de prensa de que en el proceso no se han hallado datos inculpatorios contra Pons.
La causa contra el sacerdote se inició a raíz de una denuncia de abusos sexuales en marzo de este año. Los testimonios y datos recopilados por el tribunal eclesiástico exoneran al sacerdote de las responsabilidades criminales que le atribuía el denunciante, por lo que la causa queda cerrada por la vía canónica.
El pasado día 11 de marzo, el obispo Javier Salinas aceptó de forma cautelar la renuncia del rector de sa Pobla, envuelto en dos escándalos sexuales, a pesar que días más tarde, el denunciante se personara en los juzgados de Inca para retirar la denuncia.
Apoyo social
El rector siempre ha contado con el apoyo de los vecinos de sa Pobla. Hasta tal punto que el joven que lo denunció tuvo que salir del pueblo.
Según el relato de numerosos vecinos y feligreses, Alfredo A.C., de 32 años y nacionalidad española, no consiguió aguantar la presión y el rechazo social al que estaba siendo sometido en los últimos meses desde que saltó el escándalo.
Alfredo, interpuso la denuncia contra el exrector de sa Pobla, el pasado 10 de marzo de 2015. Desde ese día su vida se convirtió en una auténtica pesadilla y los encontronazos con algunos vecinos que defendían la inocencia del sacerdote no se hicieron esperar. A los 20 días de interponer la denuncia en el cuartel de la Guardia Civil, el joven se retractó de sus duras y graves acusaciones contra el párroco y decidió no seguir adelante con el proceso judicial abierto.