Para cometer una estafa, además de picaresca hay que ser cuidadoso con todos los detalles. En caso contrario lo más probable es que te descubran y acabes detenido. Y si no que se lo pregunten a un hombre que ha sido arrestado en Palma por estafa y falsedad documental, después de que presentara al seguro una factura que él había elaborado y estaba repleta de errores y faltas de ortografía.
El varón, de nacionalidad venezolana, posee un negocio en Palma y sufrió una avería real. Dio parte al seguro y desde la compañía le indicaron que lo arreglara y presentara la factura. El venezolano arregló los desperfectos en plan chapucero. Después falsificó la factura y la envió al seguro para que le pagara el coste de la reparación. En esta factura falsificada había 455 euros de mano de obra y material, por lo que el coste total de la reparación superaba los mil euros. Sin embargo, escribió con «c» en lugar de doble «s» el nombre de la empresa, muy conocida en Mallorca, y en el desglose de la factura había faltas de ortografía y expresiones incorrectas. Desde el seguro se dio cuenta a la policía del supuesto fraude y los agentes, al ver las irregularidades, detuvieron al varón.