Agentes del Cuerpo Nacional de Policía procedieron a la detención de un colombiano de 29 años de edad acusado de agresión y amenazas de muerte.
Al parecer, el enfrentamiento entre dos grupos de jóvenes latinos provocó que la Policía Nacional tuviese que tomar posiciones, identificar a numerosas personas y realizar cacheos.
Todo se inició el pasado sábado cuando un joven de nacionalidad ecuatoriana estaba en compañía de su novia y de un amigo de ambos en el citado parque. En ese instante, según consta en su declaración policial, se acercó un grupo de chicos y, sin mediar palabra alguna, les comenzaron a agredir esgrimiendo uno de ellos un cuchillo. Ante estos hechos emprendieron la huida y solicitaron ayuda a la Policía Nacional.
La descripción facilitada apuntaba a que los agresores eran sudamericanos, según las víctimas, de nacionalidad colombiana.
En cuestión de minutos, tres dotaciones de Radio Patrullas (zetas) irrumpieron en el parque, rodearon a los presuntos agresores y procedieron a su identificación y cacheo.
Los agentes separaron a los sospechosos y mientras estaban siendo cacheados minuciosamente otros policías pasaban sus filiaciones a la base del 091 para comprobar si estaban fichados o tenían alguna requisitoria pendiente.
Al ser preguntados por lo ocurrido, algunos de ellos reconocieron que habían tenido algún problema con unos chicos de otro grupo, pero negaron su pertenencia a ningún tipo de bandas latinas.
Cuando los policías realizaron una batida por la zona pudieron ver cómo en una de la papeleras del parque habían escondido un cuchillo de grandes dimensiones. Dicha arma fue reconocida por las víctimas. El colombiano de 29 años fue arrestado dado que las víctimas lo reconocieron sin ningún género de dudas como el agresor.
El enfrentamiento generó alarma en la zona, pero la rápida actuación del Cuerpo Nacional de Policía evitó males mayores.