El exintendente de la Policía Local de Palma, Antoni Vera y el exdirector de Seguridad Ciudadana de Cort, Enrique Calvo, declaran esta mañana como imputados por el supuesto amaño del examen de ascenso a oficial del cuerpo.
Vera tendrá que responder sobre los indicios que motivaron su implicación, por un lado la Guardia Civil sostiene que manipuló su ordenador para borrar pruebas, además alguno de los supuestos beneficiados tiene vínculos personales con él y, por último era el presidente del tribunal, lo que implica que tenía el deber de custodiarlas. De hecho, la magistrada en el auto en el que le imputaba le colocaba al mismo nivel de responsabilidad que al jefe de área, Enrique Calvo y señala que hay indicios de que ambos filtraron los exámenes de la prueba para oficiales. Antoni Vera dimitió el pasado 18 de septiembre días después del registro de la Guardia Civil en el cuartel de San Fernando. Antes ya había caído la primera víctima política, el jefe de área Enrique Calvo. Junto a ellos declararán también tres de los policías que supuestamente recibieron las respuestas y que, gracias a ellos llegaron a oficiales.