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La red de tráfico de anabolizantes también estafaba a aseguradoras fingiendo lesiones en accidentes

La policía detecta más de 20 posibles fraudes en los que los implicados simularon heridas para cobrar indemnizaciones

El jefe de la Udyco durante la rueda de prensa de ayer. | Alejandro Sepulveda Soler

| Palma |

Los detenidos por tráfico de sustancias anabolizantes, hormonas y esteroides formaban «la red más importante en Mallorca vinculada a esta actividad criminal». Así lo manifestó ayer el jefe de la Unidad Antidrogas y Crimen Organizado (Udyco) del Cuerpo Nacional de Policía de Palma, Toni Suárez, quien compareció en rueda de prensa para informar de los detalles de la 'operación Cóctel', de la que se ha venido informando en este periódico en los últimos días Además de traficar con sustancias y medicamentos dopantes, también se ha averiguado que miembros de la red están relacionados con posibles fraudes a aseguradoras de vehículos. Según la policía, simulaban lesiones de accidentes de tráfico sufridos con coches antiguos de su propiedad o de alquiler, para después cobrar indemnizaciones por lesiones. En este sentido, el jefe de la Udyco explicó que se están investigando más de veinte posibles fraudes por este sistema.

Detenidos

En total han sido detenidas 13 personas. Diez de ellas estaban involucradas, en distintos niveles, en el tráfico de anabolizantes, y los supuestos cabecillas de la red eran los hermanos Yvaico y Nicolay D.I., búlgaros de 30 y 26 años. Ambos ya fueron detenidos hace dos años por el mismo motivo. Entre estos 10 detenidos hay dos que también están implicados en los fraudes a las compañías aseguradoras, junto a otras tres personas.

Toni Suárez recordó ayer que la investigación de la operación se inició hace seis meses. Los compradores de las sustancias dopantes eran deportistas vinculados al mundo del culturismo.

El jefe de la Udyco indicó que los medicamentos se vendían en el mercado negro por un precio 15 ó 20 veces superior al de las farmacias y que al estar en trasteros, no estaban en las mejores condiciones. También dijo que se han halado muchos recipientes vacíos y la red los vendía rellenos de sustancias inocuas como si fueran verdaderos. Por tanto, recordó Suárez, muchas veces los usuarios de estos productos dopantes «ni siquiera sabían lo que se metían en el cuerpo, había grave riesgo para su salud y por eso hablamos de actividad criminal».

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