La Policía Nacional confirmó que sobre las cinco de la madrugada de ayer varios agentes localizaron restos humanos en el interior de un arcón frigorífico ubicado en el primer piso del número 6 de la calle Pere Llobera, en la barriada palmesana de Pere Garau, a escasos 100 metros del tradicional mercado.
La historia se remonta a las 03.52 horas de la madrugada. En ese instante, un varón de nacionalidad española identificado como Diego Antonio Galeote Rosselló, de 38 años de edad, se personaba en dependencias de la Jefatura policial de Palma y confesaba haber matado y descuartizado a su hermano menor.
En su confesión ante los agentes de la oficina de denuncias, afirmó que tras haber matado a su hermano, lo descuartizó y lo introdujo en un arcón frigorífico de su casa.
Rápidamente, una patrulla con el compareciente en su interior, se dirigió al domicilio citado y comprobaron que en un mueble bajo de la cocina había un congelador, donde los funcionarios localizaron restos óseos y vello corporal aparentemente humanos. En la misma cocina, en una nevera tipo ‘combi', en el congelador de la parte inferior, hallaron distintos trozos de carne y un pie humano. En su confesión, Diego afirmó que el fallecido era su hermano Víctor Galeote Rosselló, de 32 años de edad.
El arrestado y la víctima convivían en la misma vivienda desde hace aproximadamente un año, lo que había generado fuertes desavenencias entre ambos. Según el testimonio de algunos vecinos y amigos del agresor, la relación con su hermano no era buena debido a problemas de índole económico.
En su declaración, el homicida confeso afirmó que, en una de las múltiples riñas mantenidas en el domicilio con su hermano, éste cogió un martillo e intentó agredirle, pero dado que él era más fuerte se lo arrebató y le asestó varios golpes. Que la agresión se produjo en el pasillo, a la altura de la cocina. Que una vez en el suelo continuó golpeándole y que posteriormente lo troceó y lo metió en el congelador.