Imputan por maltrato animal a dos hombres que castraron a un poni con técnicas no autorizadas

La Guardia Civil ha detenido a dos personas en Mallorca por utilizar la técnica de ‘las cañas’ para castrar un poni. Se trata de un método que ahora es ilegal por los riesgos que entraña para el animal y el enorme sufrimiento que le causa, pero que se ha utilizado durante siglos para castrar a todo tipo de equinos. El procedimiento consiste en realizar una especie de torniquete al animal en torno a los testículos para dejar a estos órganos sin riego sanguíneo y que, de esta manera, dejen de funcionar.
La salvaje operación fue detectada por un veterinario que examinó al animal más tarde. El Colegio de Veterinarios de Balears presentó una denuncia ante el servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil (Seprona) que comenzó a investigar lo ocurrido con el poni. Las pesquisas llevaron a que los agentes localizaran tanto al animal como el lugar donde se había realizado la operación, por lo que procedieron a tomar declaración a los dos hombres implicados en el suceso y a imputarlos por delitos de intrusismo profesional y de maltrato animal.
Dueño
Uno de los imputados por el Seprona es el dueño del animal que le pidió a un conocido suyo que realizara la intervención ilegal.
La Guardia Civil recuerda en un comunicado que este tipo de operaciones sólo las pueden llevar a cabo profesionales debidamente acreditados, de ahí la imputación por un delito de intrusismo profesional. El autor de la castración, en este caso no era veterinario, sino simplemente era una persona que suele llevar a cabo estas actuaciones.
No es el primer caso similar que investiga la Guardia Civil en Mallorca. Estas operaciones tradicionales ya provocaron la muerte de un caballo en Magaluf, llamado ‘Romerito’. El dueño del equino denunció en este caso lo ocurrido y la persona que llevó a cabo la operación fue juzgada y condenada por ambos delitos. En ese caso, el caballo sufrió una infección fruto de la operación y murió como consecuencia de la misma.