Agentes de la Policía Científica del Cuerpo Nacional de Policía se desplazaron ayer hasta las naves de Son Castelló y Mercapalma afectadas por los incendios para iniciar las investigaciones sobre las causas. Los afectados y los peritos también comenzaron a evaluar los destrozos, que son millonarios, y a tratar de recuperar su actividad. Por su parte, los bomberos continuaron trabajando en las labores de extinción, que no se han dado por finalizadas.
Las causas del incendio de Son Castelló, que ya se ha dado por extinguido, están claras. El fuego se inició cuando un joven que trabajaba en un taller acercó un bote de cola a un foco. Las llamas se propagaron con rapidez y el resultado fue devastador: Siete naves inservibles además de una planta de oficinas. Los agentes de la Policía Científica se introdujeron entre los restos de las naves para obtener indicios y realizaron un reportaje fotográfico.
También acudieron a la nave destrozada en Mercapalma, perteneciente a la empresa Frimar Panaderos Baleares, que elaboraba masas congeladas de pan y bollería. La empresa traslada ahora el género a la Isla desde Valencia y ha alquilado una plataforma de logística para que su distribución no se vea alterada. La nave de Mercapalma ocupaba 12.000 metros cuadrados y ha quedado reducida a un amasijo de hierros. La Policía Científica sobrevolará los restos en el helicóptero del CNP para poder determinar cuál fue el foco del incendio y la posible causa. Por otro lado, la Asociación de Industriales de Mallorca (ASIMA) informó ayer que está trabajando desde hace meses con el Govern para elaborar el primer proyecto piloto de España de un plan de emergencias y evacuación en un polígono industrial, en concreto en el de Can Valero. El director de ASIMA destacó la necesidad de establecer protocolos en materia de seguridad y dar una respuesta rápida ante un siniestro, tras los incendios de este fin de semana.