Un marroquí cargado con dos cinturones repletos de droga fue interceptado por la Guardia Civil en el Port de Palma. En total, los agentes se han incautado de 1,700 kilogramos de hachís y 50 gramos de cocaína.
De acuerdo con los datos facilitados por la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia de Palma, la detención del sospechoso -que ha sido identificado como H.H., de 48 años- se produjo después de que llegara al puerto un buque de pasajeros procedente de Barcelona.
El barco atracó en el muelle del Dique del Oeste y los pasajeros fueron descendiendo por la pasarela. A continuación, pasaron por el control de la Guardia Civil y los agentes repararon en uno de ellos, que estaba nervioso y parecía sospechoso.
Cacheo
El hombre fue cacheado y enseguida se detectó que portaba algo extraño adosado a la cintura. Se trataba de dos cinturones, cargados con 17 tabletas de 100 gramos de peso cada una de ellas. La sustancia del interior era hachís.
Los funcionarios siguieron cacheando al pasajero magrebí y descubrieron que también escondía una bolsita con 50 gramos de cocaína.
H.H. fue detenido por un delito contra la salud pública y lo trasladaron hasta la Comandancia palmesana, donde el EDOA (Equipo Antidroga) se hizo cargo de las investigaciones.
Todo apunta a que el detenido es una ‘mula' que había sido contratado por una banda de narcotraficantes para hacer el viaje a la Península, cargar la droga, y volver a Palma por vía marítima desde Barcelona. Ahora, las pesquisas se centran en identificar a los hampones que financiaron el viaje del magrebí.