El juez de guardia ayer en Palma tomó declaración a los siete detenidos en la 'operación Rosario' contra el tráfico de drogas. Los arrestados por el Grupo de Estupefacientes del Cuerpo Nacional de Policía fueron trasladados a los juzgados de Vía Alemania por la tarde, donde comparecieron ante el juez, que dictó auto de prisión para seis de los siete detenidos, dejando en libertad a una majer.
La policía detuvo a las siete personas el pasado fin de semana: a tres de ellos el sábado cuando desembarcaban dos kilogramos de cocaína en el puerto, en un barco procedente de Dénia, y a otros cuatro en los registros realizados el domingo en cuatro domicilios y tres locales comerciales en Palma y Santa Margalida.
Al frente de la organización, los investigadores sitúan a dos hombres, John Alexander M. F., de 39 años de edad y José Fernando T. C., de 36. Estos dos serían los encargados de coordinar la actividad del grupo y la llegada de cocaína a la Isla. Los otros cuatro se encargarían de guardar la droga y de distribuirla al por menor. Los agentes incautaron al grupo además de dos kilogramos de cocaína, una pistola, una gran cantidad de dinero en efectivo y, en la parte de atrás de una tienda de ropa descubrieron un pequeño laboratorio que el grupo utilizaba para manipular la droga. Los detenidos en el puerto de Palma llevaban cuatro kilogramos de sustancias para adulterar la cocaína.
La declaración de los siete detenidos se retrasó por una de las habituales caídas del sistema informático judicial, en este caso una ya prevista.