La muerte de Cándido, un motorista de 48 años de edad, registrada hace unos días al sufrir un aparatoso accidente de tráfico en la confluencia de la calle Balmes con Nuño Sanz ha sido la gota que colmó el vaso de los vecinos de la barriada.
Desde el pasado sábado, un movimiento vecinal se puso en marcha y se inició una recogida de firmas para solicitar al Ayuntamiento de Palma que ponga fin a uno de los puntos negros más importantes de la ciudad. En su escrito, los vecinos apuntan: «Hemos visto muchos accidentes en ese lugar. Primero hay un 'stop' señalizado justo antes de un paso de peatones, seguido de un paso de carril bici y con varios bares en las esquinas.
Incorporación
Cada vez que un coche quiere incorporarse a la calle Balmes se la juega, tanto él como el que viene por la calle principal. Aparte de mirar que no vengan peatones ni bicicletas, tienen que meter el morro hasta ponerse en peligro debido a la falta de visibilidad del cruce», relatan los vecinos. «No sólo es eso, también hay que añadir que los peatones se lanzan sin mirar si viene algún coche y las bicicletas pasan como si la calle fuera sólo suya sin respetar las señales de precaución que están pintadas en el correspondiente carril bici», apuntan.
500 firmas
De hecho, desde que el movimiento vecinal inició la recogida de firmas, ya son más de medio millar los ciudadanos que han apoyado dicha iniciativa.
Uno de los representantes vecinales, Manuel Muñoz, añade: «Nosotros creemos que lo mejor es poner un semáforo y, de esta manera evitaremos más muertes. ¿Cuántos finales trágicos se producirán hasta que los políticos nos hagan caso, escuchen nuestras peticiones y eliminen el punto negro?», concluye Muñoz.
Las firmas serán entregadas en Cort en los próximos días.
En la tarde de ayer, un coche y un motorista protagonizaron un nuevo accidente en el mismo punto donde, días atrás, falleció un motorista. Los vecinos están indignados.