La Guardia Civil no tiene constancia de que Miguel Hidalgo Torreblanco, de 65 años, tuviera antecedentes o denuncias por malos tratos a su mujer. La relación entre los dos se había enturbiado en los últimos meses, pero parece ser que la separación la llevaban de forma civilizada. Ayer tarde, la noticia de la doble muerte se propagó por Inca y Lloseta con rapidez y dejó conmocionados a los familiares, amigos y vecinos de la familia. Bernat Coll, alcalde de Lloseta, explicó que es vecino de dos de los hermanos de Miguel: «Los conozco de toda la vida y me que quedado destrozado cuando me han contado lo ocurrido. Es algo muy difícil de asimilar». El alcalde de Inca, Rafel Torres, acudió al lugar de los hechos y en todo momento fue informado por la Policía Local de lo que iba aconteciendo. «Estamos todos muy mal, porque es una tragedia horrible lo que ha ocurrido. Nadie se lo cree, son cosas que no se entienden», explicó.
Parricidio en Inca
Sin antecedentes o denuncias por malos tratos a la mujer
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