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Detenido un marroquí por tener encerrada a su mujer durante dos años en sa Pobla

El arrestado impedía salir del domicilio a la mujer y que incluso recibiera asistencia médica cuando la precisó

La Guardia Civil de sa Pobla detuvo al joven marroquí por detención ilegal, malos tratos y amenazas. | Alejandro Sepúlveda

| Sa Pobla |

La Guardia Civil ha detenido en sa Pobla a un joven marroquí que supuestamente ha tenido encerrada a su mujer durante dos años en el domicilio que compartían en la localidad. El sospechoso, de 27 años de edad, está acusado de un delito de detención ilegal, malos tratos en el ámbito familiar y amenazas, según informó ayer la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Guardia Civil.

La Guardia Civil tuvo constancia de los hechos y realizó una serie de gestiones. Después comprobó que el detenido, identificado como Abdelwahab A., había prohibido a su esposa salir del domicilio bajo constantes amenazas. La víctima sufría también continuas humillaciones e insultos y vivía en condiciones infrahumanas.

Asistencia

Asimismo, el detenido había impedido que su esposa, también de nacionalidad marroquí, recibiese atención médica cuando la había precisado. La mujer tenía prohibido salir a la calle y si no había sido encerrada con llave había sido gravemente amenazada. A raíz de todos estos hechos, los agentes de la Guardia Civil procedieron a la detención de Abdelwahab A.

El individuo se mostró ultraconservador al ser interrogado por los investigadores y muy machista. También dio a entender que obligaba a su mujer a estar en el domicilio sin salir a la calle, ya que no quería que pudiera mantener contacto o se relacionara socialmente con otros hombres. Esta posibilidad tenía obsesionado al joven marroquí.

Una vez instruidas las diligencias, el sospechoso fue puesto a disposición del juzgado en funciones de guardia de Inca. A la víctima se le proporcionó asistencia sanitaria, así como ayuda psicológica. En el informe de la Guardia Civil se pone de manifiesto las condiciones infrahumanas en las que ha estado viviendo durante meses.

El caso ha causado sorpresa entre vecinos y residentes de sa Pobla, ya que la convivencia entre la comunidad magrebí y los nativos se considera ejemplar. Al respecto, la Policía Local de sa Pobla lleva a cabo diversas iniciativas y mantiene un estrecho contacto con la mayoría de integrantes de la comunidad marroquí en la localidad.

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