Los bomberos que intervinieron en primera instancia en la extinción del incendio del bar de la calle Andreu Feliu quedaron desorientados tras desplomarse el falso techo. La manguera que utilizaban de guía se rompió, el local se llenó de humo y fuego y los bomberos quedaron aturdidos en el interior.
Uno de ellos resultó herido de diversa consideración, otro falleció y un sargento que entró para rescatarlos también sufrió quemaduras graves.
Los bomberos y la policía continúan investigando el incendio del bar «Jamón Jamón», que acabó siendo trágico y se cobró la vida de un bombero de Palma en acto de servicio por primera vez en los 150 años de historia del Cuerpo.
A priori, el incendio en el bar era como muchos otros siniestros, aunque al final se complicó. El procedimiento de intervención consistió en el habitual, es decir, en la llegada de un camión con seis efectivos: cuatro bomberos, un conductor y un mando, que después fueron apoyados por otros compañeros. El fuego estaba localizado al final del bar, que es bastante profundo.
En primer lugar entraron dos bomberos con la manguera y otro con la cámara térmica. Este trío era la «punta de lanza» y, como máximo, puede permanecer 20 minutos al frente. Después tiene que ser relevado por los otros compañeros de fuera. La manguera, además de para apagar el fuego, sirve de guía para saber el camino de salida en caso de problemas.
Sin embargo, cuando los bomberos iban accediendo al local, el falso techo se desplomó, ya que el fuego se había propagado por encima. Al caer el falso techo el local se llenó aún más de humo, de polvo, de llamas y la temperatura aumentó. Al caer los cascotes se descolló la manguera y perdieron la guía. Uno de los bomberos salió a pedir ayuda y los otros dos, Juan Gabriel Moyá y Alejandro Ribas, quedaron totalmente desorientados, enredados entre los restos del falso techo y llegaron a quedarse sin aire.
Rescate
El sargento Pep Toni Far, que había acudido al siniestro, entró a por sus compañeros. Logró rescatar primero a Juan Gabriel y después entró junto a cuatro compañeros más de otra dotación a por Alejandro. El sargento sufrió quemaduras de primer y segundo grado. Alejandro Ribas había entrado en parada cardíaca y fue reanimado durante más de media hora, pero no se pudo hacer nada por salvarle la vida.
Acerca de las causas del fuego, tanto los bomberos como la policía prosiguen la investigación para saber por qué se inició el fuego. Uno de los mandos que participaron en la extinción apuntó que si se inició en el falso techo puede que fuese por un fallo eléctrico, pero es una hipótesis y hay que esperar a que termine la investigación y se sepa todo.