Ports de Balears finalizó ayer las labores de extracción, limpieza y desplazamiento de los restos calcinados pertenecientes a los barcos incendiados hace trece días en el Port d'Andratx.
Tras el incendio, los responsables de puertos, durante dos días, realizaron un laborioso trabajo en el pantalán flotante situado frente a la avenida Mateu Bosch, en el Port d'Andratx.
Un amplio dispositivo integrado por varios submarinistas especializados en rescates, tres grúas de grandes dimensiones, un camión-trailer y numeroso personal de tierra, consiguieron reflotar los dos yates y una lancha, de grandes dimensiones, que se vieron afectadas en el incendio del pasado día 14.
Los propietarios de las embarcaciones afectadas son dos ciudadanos alemanes y un catalán.
El proceso de reflote fue muy complicado y precisó de una gran precisión. En primer lugar, los buceadores colocaron unos enormes globos en los restos que se encontraban en el fondo del mar. Después, se hincharon y, poco a poco, subieron a la superficie. Una vez arriba, con ayuda de unas grandes sujeciones fueron enganchados y extraídos del agua con una grúa.
Una vez en tierra firme, un camión se llevó los restos hasta un depósito, sito en un finca de Andratx, a la espera que los peritos de las respectivas compañías aseguradoras autoricen su destrucción o que sean enviados hasta los astilleros para su posterior reparación.
Cabe destacar que los responsables de Ports de Balears, una vez en la zona, comunicaron a los propietarios de las embarcaciones afectadas por el último temporal de la obligación de retirar los restos de la zona del muelle.