Sufrir un accidente de tren, permanecer casi dos semanas hospitalizado, más de 20 días de baja laboral y otros tantos de rehabilitación tiene un coste para las arcas de la compañía aseguradora del tren de Inca de algo más de 1.500 euros.
Ésta es la «ridícula indemnización», según los expertos, la que ha recibido Joan Josep Bargues en concepto del accidente férreo que sufrió el pasado 31 de marzo de 2008, en Manacor.
Indignados
El joven, ya recuperado, se mostró muy sorprendido al conocer el importe que, según el seguro, le corresponde percibir. «Mi abogado me ha dicho que esto es lo que hay. Al parecer, la compañía aseguradora se basa en las condiciones del contrato que tiene firmado con la Conselleria de Mobilitat del Govern, y poco se puede hacer. Yo, después de pagar los honorarios de mi letrado, no he llegado a cobrar ni 1.300 euros», afirma Bargues.
Por otra parte, una de las víctimas del accidente, una mujer de 84 años de edad y natural de Sineu, perdió la mobilidad de uno de sus brazos a raíz del siniestro. Todo apunta a que se pusieron en contacto con ella y le ofrecieron 400 euros de indemnización, cantidad que rechazaron tajantemente. El caso sigue su curso en los tribunales de Justicia.
Por su lado, la Conselleria de Mobilitat y Serveis Ferroviaris de Mallorca (SFM), a través de su gabinete de comunicación, han manifestado que: «Nosotros hemos consultado a nuestro gabinete jurídico y nos han dicho que estamos al corriente de pagos, que los dos seguros que dispone el tren están en vigor y que el tema de las indemnizaciones es un tema única y exclusivamente de la compañía aseguradora. El Govern aquí no tienen ninguna culpa. Es más, por la experiencia que tenemos en cuestión de quejas os podemos decir que los seguros tienen unos baremos establecidos por las secuelas y los aplican en estas circunstancias».
Según fuentes de SFM, el Govern tiene contratado dos seguros. El primero de ellos es el seguro obligatorio que cada pasajero adquiere con su billete de tren. El segundo corresponde a la cobertura de un seguro de responsabilidad civil que SFM tiene contratado y que cubre la totalidad de las secuelas que puedan derivarse de los accidentes.
Algunos de los afectados consultados por Ultima Hora, han destacado que: «Parece ridículo que hayamos sufrido un accidente de tren gravísimo, y ahora, uno por el otro, la casa sin barrer. Hay que recordar que si la topera no hubiera detenido el convoy estaríamos todos muertos. Nos parece muy injusto la situación que estamos viviendo», concluye.
En el accidente se registró un total de diez heridos. El siniestro se produjo, a las 9.45 horas, en Manacor. El tren debía detenerse en la estación, pero entró en el recinto a una velocidad superior a la habitual y no se paró, sino que continuó hasta chocar contra la pieza que hace de tope final.
Algunos pasajeros que iban en el convoy salieron despedidos y se golpearon contra ventanas y sillas.