Un cortocircuito en el enchufe de la televisión provocó el incendio que la noche del martes calcinó por completo una vivienda en el Port de Pollença, según confirmaron los vecinos a este periódico.
Al declararse el fuego los vecinos fueron desalojados y no hubo que lamentar heridos.
Los vecinos relataron ayer que las llamas se dispersaron y salieron por las ventanas alcanzando una de las cortinas del piso de arriba y dejando toda la fachada negra.
La agrupación de Protección Civil del Port fue la primera en llegar al lugar e intentó enfriar las paredes del edificio.
La Guardia Civil y los bomberos desalojaron a todos los vecinos, aunque sólo la dueña del piso donde se produjo el fuego y la vecina de encima, cuyo piso resultó gravemente dañado, tuvieron que pasar la noche fuera de casa.
Francisca Ramón, delegada del Ajuntament de Pollença en el Port, indicó que «intentaremos ayudar a la dueña del piso y atender a sus necesidades». Una de las trabajadoras del bar que se encuentra debajo del inmueble explicó que «cuando vi el fuego cogí un extintor y subí para intentar apagarlo, pero cogió mucha fuerza».