JULIO BASTIDA
Magdalena es una mujer rota y desesperada. Después de trabajar toda una vida y conseguir un patrimonio considerable y estable se vio inmersa en la estafa que afectó a más de 480.000 clientes del Fórum Filatélico y Afinsa.
«Yo soy mallorquina de toda la vida. Mi madre, desde tiempos inmemorables, era una hormiguita que, poco a poco, había dejado unos ahorros a sus dos hijas. En un momento de mi vida decidí vender dos propiedades que tenía; un piso de 180 metros cuadros en el centro de Palma y otra vivienda que me había correspondido en herencia. Hasta aquí todo perfecto», relata Magdalena visiblemente afectada.
«Yo tenía desde hacía unos años dos planes de jubilación con Afinsa. La citada inversión era rentable. No tengo por qué engañarte. La verdad es que daba un beneficio muy alto y cada mes nos entregaban un talón con los beneficios. En ese momento fue cuando decidí invertir el dinero adquirido de la venta de las dos viviendas y además completar la operación con otra importante cantidad de dinero de la que disponía. El día 9 de mayo de hace tres años, explotó todo. Ese día por la mañana tuve que enterrar a mi madre. Fueron unos días muy duros. Al llegar a casa, me acosté un rato. Yo siempre tengo la costumbre de dormir con la radio puesta y, saltó la noticia. 480.000 clientes del Fórum Filatélico y Afinsa, entre los que me encontraba yo, habían sido estafados en una de las mayores acciones delictivas de España», relata entre lágrimas.
Según Magdalena, en Mallorca el número de afectados por la estafa de Afinsa puede ascender a más de tres centenares de personas.
«Lo hemos perdido todo. Lo peor de todo es que nadie nos dice nada. He leído por internet que a lo mejor conseguimos recuperar un 33 por ciento de nuestra inversión. Si fuese así, ya me daría por satisfecha. Lo he perdido todo. Ahora estoy con el agua al cuello y viviendo de la caridad de mis hijos. Quiero que se entienda la expresión. Yo a mis hijos los quiero con locura y ellos a mí me adoran, pero no es justo lo que me ha sucedido. Yo podría vivir tranquilamente y de manera holgada y ahora me veo en la obligación de sufrir penurias. Con mi pensión no me basta ni para pagar el alquiler de la casa donde vivo», concluye.
Magdalena, en su juventud, era conocida en el barrio donde residía como la madre coraje. Una mujer trabajadora, luchadora, de una posición y estatus social elevado. Ahora, refugiada en un piso de alquiler y con el apoyo incondicional de su familia se ha convertido en una luchadora y abanderada de los afectados por la estafa de Mallorca.
Varias sedes de las empresas Afinsa Bienes Tangibles y Fórum Filatélico fueron precintadas el 9 de mayo, tras una denuncia de la Fiscalía Anticorrupción por la presunta comisión de varios delitos económicos.
El número de ahorradores que habían invertido en ambas compañías de inversión colectiva era de unos 480.000. Estos ciudadanos ahora se ven afectados por una posible estafa a gran escala. Las sociedades fueron acusadas de haber estafado unos 5.000 millones de euros a sus clientes.