El apuñalamiento se produjo en la calle Mestral, a la entrada de Porto Cristo, tras un concierto que se celebró por la noche.
La víctima es un vecino de Son Servera, de unos 28 años, que había acudido a ese núcleo turístico con unos amigos. La discusión parece ser que se inició por una chica que iba con cuatro magrebíes y que supuestamente también conocía el vecino de Son Servera. Entre los dos grupos se inició una discusión y el que se llevó la peor parte fue el joven mallorquín, que fue apaleado por los cuatro marroquíes y no tuvo opción de defenderse.
Uno de los contrincantes le golpeó en la cabeza con una piedra, lo que le provocó una brecha por la que comenzó a sangrar de forma abundante. Otro de los atacantes le apuñaló por la espalda, a la altura del hombro, y le asestó una segunda cuchillada en una pierna. El grupo escapó corriendo y el herido quedó tendido sobre la calzada, con sus ropas ensangrentadas y en estado grave. Vecinos y testigos de la agresión dieron aviso a la Unidad Territorial de Costas (UTC) de la Policía Local de Porto Cristo, que lo atendió in situ. Los agentes solicitaron la comparecencia urgente de una ambulancia, para cortar la hemorragia, y llevaron a cabo algunas gestiones para saber qué había ocurrido. Poco después el Cuerpo Nacional de Policía se hizo cargo de la investigación y comenzó la búsqueda de los cuatro sospechosos y la joven que los acompañaba. La mujer es una residente de Manacor y ya desde el primer momento quedó identificada. El mallorquín apuñalado quedó ingresado en el hospital de Manacor, donde le aplicaron algunos puntos de sutura en la zona craneal y le curaron las puñaladas. Ninguna de las dos heridas incisas le alcanzó órganos vitales. La recuperación del varón ha sido buena y días después él mismo pudo presentarse en la comisaría de Policía para interponer la correspondiente denuncia. Ayer todavía no había trascendido si los cuatro implicados han sido ya detenidos.