Representantes de los dos clubes deportivos más importantes del país se personaron ayer en un juzgado de Palma, como acusación particular, en el procesamiento de Guillermo A., un mallorquín al que le incautaron más de 7.500 equipaciones falsas.
La pena que inicialmente se solicitaba para el empresario mallorquín era de dos años de cárcel, pero su abogado defensor, el penalista Gaspar Oliver logró que la pena de prisión fuera sustituida por doce meses de multa, a razón de seis euros por día.
Además, Guillermo deberá pagar 20.000 euros al Real Madrid, y 9.000 euros al F.C. Barcelona en concepto de responsabilidad civil.
Durante la vista que se celebró ayer en el Juzgado de lo Penal número 6 de Palma, el procesado reconoció los hechos y prestó su conformidad con la condena.
Guillermo A., de 35 años de edad, fue detenido en el año 2005 cuando miembros de la vigilancia Aduanera del Port d´Alcudia irrumpieron en dos locales propiedad del procesado, donde localizaron unas 2.000 prendas deportivas correspondientes a equipaciones de diferentes clubes de fútbol, escuderías de Fórmula 1 y motociclismo, así como marcas de ropa de prestigio. Todas estas prendas eran falsas.
Según el Ministerio Fiscal, meses antes de la detención del empresario, éste había ido a recoger en el Polígono de Son Castelló nueve bultos que contenían aproximadamente 5.700 unidades de diferentes prendas deportivas, que se correspondían principalmente con equipaciones de clubes importantes como el Madrid o el Barcelona.
Tales prendas no eran auténticas, no presentaban cosidas las etiquetas de seguridad y, sobre todo, no habían sido autorizadas por el legítimo titular de la marca. Por ello, representantes del Madrid y del Barça se han personado en el juicio.