La Associació de Caps i Comandaments de la Policia Local de les Illes Balears (ACCIBPOL) comenzará a negociar con los ayuntamientos y con la Conselleria de Interior, una modificación de la normativa que regula la actividad del cuerpo para garantizar que en caso de que un alcalde decida sustituir al jefe de su policía local, este pueda dedicarse a una segunda actividad en lugar de convertirse en un subordinado.
Esta es una de las cuestiones que analizan los jefes de las policías locales de los distintos municipios de la Part Forana que celebraron ayer su asamblea general en el Claustro de Sant Domingo de Inca. Los jefes de las policías locales de las Islas quisieron además dar su apoyo moral y técnico al mayor de la Policía Local de Manacor, Antoni Sureda, que precisamente ha sido relevado por el alcalde Antoni Pastor recientemente.
La asamblea de jefes de las policías locales analizó además otras cuestiones que afectan a su trabajo diario. Así, el presidente de la asociación y jefe de la Policía Local de Inca, Baltasar Perelló, explicó que «la sociedad está cambiando mucho, antes la gente quería ver mucha policía en la calle y ahora eso ya no es así, lo que la gente requiere es un servicio rápido y eficaz, recibir una atención correcta y hacia ahí se debe caminar».
Perelló explicó que proyectos como el Plan de Calidad ISO 9000-2001 que se desarrolla ahora en Inca «nos llevarán a mejorar en este tipo de demandas sirviéndonos además de una supervisión externa».
La Associació de Caps i Comandaments de la Policia Local se constituyó oficialmente en noviembre de 2006 y desde entonces trabaja para estimular el debate en materia de seguridad, analizar el papel de la policía en los municipios y presta apoyo a los miembros del cuerpo cuando lo necesitan.