JAVIER JIMÉNEZ
Francisco Javier Hernández Mascaró, un trabajador de 41 años, sufrió ayer lesiones muy graves al ser aplastado por la grúa del camión que conducía, cuando trataba de manipularla.
El accidente laboral ocurrió minutos antes de las doce del mediodía en la calle Mossèn Bartomeu Barceló, cuando el chófer de un camión de la empresa Francisco Grimalt, dedicada a los materiales de construcción, se detuvo en un taller. El operario tenía problemas con la grúa y solicitó dos llaves en el negocio, para manipular unas tuercas. Luego se dirigió al vehículo pesado y cuando intentaba reparar la grúa, ésta se desprendió sobre él, aplastándole una pierna. «Escuchamos unos gritos terribles y al principio pensamos que eran de un cordero. Luego salimos y vimos a ese hombre atrapado, con unos dolores espantosos», contaron desde el taller de reparación de vehículos.
Agentes de la Policía Local de Felanitx, Guardia Civil, el médico del PAC, una ambulancia y bomberos acudieron hasta la calle Mossèn Bartomeu Barceló, donde Francisco Javier seguía atrapado entre la pluma y la estructura del camión. Los equipos de rescate consiguieron mover la grúa y el herido, que presentaba fractura abierta de tibia, fue estabilizado allí mismo, para calmarle el dolor. Una ambulancia lo evacuó hasta el hospital de Manacor, donde fue intervenido de urgencia. Fuentes sanitarias informaron que la pierna afectada estaba «destrozada» y que la víctima necesitaría «muchos meses» de rehabilitación para volver a trabajar. El accidente laboral ocurrió en una de las arterias de Felanitx, y el gran despliegue policial y sanitario provocó retenciones de tráfico en la ronda.