Antonio V.P., el funcionario del juzgado de paz de Calvià acusado de cohecho, negó tajantemente ayer haber cobrado dinero por realizar trabajos propios de su cargo. El juicio en su contra se celebra con jurado popular y comenzó ayer en la Audiencia de Palma. El fiscal pide una pena de suspensión de empleo público por espacio de un año y seis meses así como una multa de 1.081 euros, mientras que su abogada pide que sea absuelto.
El fiscal Pedro Horrach acusó durante el juicio a Antonio V.P. de «corrupción pura y dura en la Administración de Justicia», porque «exigía directa o indirectamente dinero a procuradores de Palma para que se tramitasen sus asuntos». Durante su intervención, el fiscal recordó una serie de visitas que supuestamente realizó Antonio V.P. a procuradores de Palma fuera de su horario de trabajo para cobrar las cantidades, que oscilaban entre 2.000 y 6.000 pesetas.
Antonio V.P., de 56 años, negó en todo momento las acusaciones del fiscal y afirmó: «Jamás he cobrado dinero para cumplir con el trabajo que tenía asignado». El presunto delito se cometió hace seis años. En este sentido, Antonio V.P. recordó que «los medios del juzgado de paz de Calvià no eran como los de otros juzgados y trabajé más horas de lo que me tocaba para poner al día el juzgado y nunca un procurador interpuso una denuncia contra mi».
Su abogada defensora destacó: «El fiscal, hasta hace cuatro meses, había imputado a 12 procuradores pero ha retirado la acusación. El Código Penal castiga tanto al que da como al que recibe, y si el fiscal retira la denuncia contra los procuradores creemos que debe hacerlo contra Antonio».