GUILLEM PICÓ-PEP MATAS
A las dos menos veinte de la tarde de ayer se declaró un incendio
en una habitación del primer piso de la residencia de suboficiales,
que tiene su entrada por la calle Ruiz de Alda, en Palma, edificio
vecino al de la Jefatura Superior de Policía. La habitación
siniestrada está situada en la parte posterior y el fuego se
detectó por parte de vecinos, al comenzar a arder una persiana de
madera que estaba abierta. Una vez avisada la sala del 091, y
mientras se requería la presencia de los bomberos, varios
funcionarios del CNP saltaron la verja que separa la Jefatura de la
residencia, y uno de ellos comenzó a atacar el fuego con un
extintor.
Se produjeron entonces una serie de explosiones, no demasiado potentes, pero sí suficientes cómo para que se tomaran precauciones. En pocos minutos las llamas se extendieron y tomaron grandes proporciones, provocando graves daños en la habitación siniestrada, así como de menor cuantía en la habitación contigua y en la fachada y ventana del piso superior. La residencia fue desalojada y la Policía Local cortó el tráfico rodado por la calle Ruiz de Alda.
Una ambulancia del 061 se desplazó al lugar pero no fue necesario atender a ninguna persona. Los bomberos desplazaron un retén del parque central y otro de sa Taulera. Poco antes de las dos y media el incendio se dio por controlado. En la habitación siniestrada había una estufa eléctrica encendida, lo que se barajaba ayer como causa más probable del incendio.