Los fuertes vientos registrados ayer y anteayer en Balears causaron numerosos incidentes y desperfectos, así como cortes de luz, el cierre de dos puertos y la suspensión de un trayecto marítimo.
Anteayer, los vientos fueron más fuertes que los de ayer. El martes, las rachas máximas fueron las siguientes: 122 kilómetros por hora en Alfàbia, 96 en Portopí, 85 en Son Sant Joan y 80 en Capdepera. Ayer, con vientos fuertes, aunque más moderados que el día anterior, las rachas máximas fueron de 94 kilómetros por hora en Alfàbia, 72 en Capdepera y Menorca, 64 en Portopí, y 54 en Eivissa. La fuerza media del viento en estos puntos osciló entre los 33 y los 58 kilómetros por hora.
Esta situación provocó ayer el cierre del puerto de Maó y, durante tres horas, del de La Savina, en Formentera, así como la suspensión de la salida de un barco de Palma con destino a Eivissa. Se trata del «Federico García Lorca», de la compañía Balearia, que tenía previsto zarpar del puerto de Palma a las 8.00 horas para llegar dos horas más tarde al puerto de Eivissa. Mientras, el puerto de La Savina se cerró a las 7.15 horas y se reabrió a las 10.10 horas. El puerto de Maó fue cerrado a las 13.20 horas.
Incidencias
Los servicios de emergencia recibieron un gran número de llamadas alertando de incidentes o desperfectos por el viento. Entre las 20.30 horas martes y las diez de la mañana de ayer, los Bombers del Consell de Mallorca realizaron una docena de salidas a causa del viento. Las más importantes tuvieron lugar en el Camí de Gràcia, en Llucmajor, donde cayó un árbol, y en Cala Vinyes, donde se alertó que una grúa de una obra estaba a punto de caer.
Durante la noche, los Bombers de Palma y la Policía Local también realizaron 14 servicios motivados por el fuerte viento, que provocó la caída de árboles, postes de electricidad o teléfonos, señales o semáforos y demás, por ejemplo en las calles Soldado Bestard Rotger, Aragó, 16 de Juliol, Pasqual Ribot o Jaume Ferran.
El temporal de viento dañó la carpa instalada en el Castell de Bellver con motivo de la entrega de los Premis Ciutat de Palma, y también obligó a cerrar parte del polideportivo Príncipes de España al romperse la cubierta del pabellón de la piscina. Varias planchas flexibles de plástico se desprendieron de la estructura y cayeron dentro del recinto y en la Avenida 16 de Juliol. Los bomberos trataron de asegurar la cubierta pero fue imposible. Así, ante el peligro de que cayesen más planchas, se optó por desalojar las áreas donde había deportistas entrenando próximas a este pabellón, para evitar que se produjesen daños personales.
En Son Ferriol, a primera hora de la tarde de ayer la Policía Local acordonó un tramo de la calle Escuela Nacional y retiró varios vehículos estacionados ya que había peligro de que cayese una grúa de una obra, aunque el incidente no pasó a mayores.