Pere Cañellas, padre de José Antonio, el bebe de seis meses que la tarde del pasado jueves fue 'secuestrado' por un toxicómano y apareció sano y salvo en Son Banya, relata a Ultima Horala experiencia con la frase: «Fue un drama. Vivimos 45 minutos de agonía que no se los deseo a nadie». Pere Cañellas aclara que el bebé estaba en el asiento trasero del turismo que conducía su esposa, Victoria. «Mi esposa bajó del coche que dejó delante de la casa de la abuela del bebé para hacerle entrega de un teléfono móvil. No tardó ni 15 segundos en regresar, y vio a un joven al volante del turismo y que arrancaba a toda velocidad con el niño dentro». La familia reside en una casa en las afueras de Santa Maria del Camí. Pere Cañellas señala que no puede concretar si el delincuente es vecino de la localidad «pero sí es cierto que mi esposa le vio la cara, y estoy seguro de que si lo vuelve a ver lo reconocerá».
Tanto Pere Cañellas como su esposa quieren destacar el excelente trabajo de policías y guardias civiles, «que se movilizaron de manera muy rápida y en cuestión de tres cuartos de hora localizaron el niño». A la pregunta sobre si ha notado un aumento de la inseguridad en Santa Maria, el hombre responde: «Lo normal en lo que respecta a un aumento de población y a que se trata de una localidad bien comunicada y por donde pasa mucha gente, pero no creo que pueda hablarse de un escandaloso aumento de delincuentes».
El hombre esboza una sonrisa al recordar los momentos vividos y el final feliz de toda esta historia. «Lo importante es que puedo contarla sin que al niño le haya pasado nada, pero se me cambia la cara cuando recuerdo esos 45 minutos de angustia y de agonía. Parecían interminables pero por fortuna todo ha acabado bien. Quiero hacer hincapié en nuestro agradecimiento a las Fuerzas del Orden, y espero que pronto puedan detener a la persona que se llevó a nuestro hijo dentro del turismo».