La banda de ingleses desarticulada en Calvià el pasado día 17 está acusada de robar por valor de un millón de euros en casas de Son Ferrer, Palmanova y Magaluf.
De acuerdo con los datos facilitados ayer desde la Oficina Periférica de Comunicación (OPC) de la Comandancia de Palma, la Policía Judicial ha conseguido aclarar numerosos robos y ha recuperado obras de arte, joyas, dinero en efectivo y cientos de efectos de dudosa procedencia. De hecho, el material intervenido es tan abundante que mañana jueves, de 10.00 a 12.00 horas, se realizará una exposición en el cuartel de Palmanova para que las víctimas de robos la pueden visitar y reconocer, si es el caso, sus pertenencias.
Tal y como informamos hace diez días, la banda estaba formada por Charlotte F., de 21 años, Adam C., de 32, Joseph T., de 19, Alex H., de 22, Janine H., de 21, Mikel D., de 56, y John F., de 32. Éste último, que era el «cabecilla» de la organización, se había fugado de una cárcel de Inglaterra.
Cada uno de los acusados tenía una misión específica en la banda; desde el perista, hasta el encargado de introducir los efectos robados en el «mercado negro». Los ingleses entraban en casas, incluso cuando los dueños dormían, y se apoderaban de las llaves. Luego regresaban días después y reventaban la caja fuerte, además de apoderarse de cuadros antiguos, joyas y electrodomésticos.