Un vecino de la calle Major número 100 de Pòrtol, en Marratxí, falleció ayer carbonizado después de que su casa de alquiler quedara envuelta en llamas. Se da la circunstancia de que hoy se cumplía el plazo de una orden judicial de desahucio y Manuel G.A. se negaba a abandonar aquel domicilio, por lo que la Guardia Civil sospecha que fue él quién provocó el fuego.
A las dos de la tarde, aproximadamente, los vecinos de la casa vieron cómo salía humo y dieron aviso a la policía y los bomberos. Los efectivos del parque central de Palma llegaron a Pòrtol en pocos minutos y encontraron serias dificultades para entrar en la vivienda, ya que había muebles obstaculizando el paso, colocados al parecer a propósito. Los bomberos se encontraron con tres focos distintos, uno en la lavandería y dos en un dormitorio, justo donde apareció el cadáver semicarbonizado de Manuel G. El hombre estaba inerte sobre la cama y cerca de él se encontró también una botella de gas con la manguera cortada y la espita abierta. La Policía Judicial de la Guardia Civil se ha hecho cargo de las diligencias para aclarar lo ocurrido pero, en definitiva, todo apunta a que el inquilino de la casa decidió quemarla antes de que se hiciera efectiva la orden de desahucio dictada por un juzgado. Mañana se efectuará la autopsia.