La jueza del Juzgado de lo Civil número uno de Manacor ha dictado una orden de alejamiento para Jaime Cánaves, el padre que secuestró a su hija el pasado mes de julio y que el viernes de la semana pasada fue localizado por la Guardia Civil con la niña en una localidad de Teruel. El hombre tiene prohibido acercarse a menos de 200 metros de su hija y de los abuelos maternos, que son quienes tienen la guarda y custodia y la Patria Potestad de la niña, de once años.
La magistrada también ha suspendido el régimen de visitas para el padre, por el momento hasta que se aclare un procedimiento abierto en el que hombre está acusado de verter amenazas contra su ex suegro, abuelo de la menor. Estas decisiones judiciales se toman una vez que se ha dado por finalizado el caso del considerado técnicamente como un secuestro parental. El viernes de la semana pasada, la Guardia Civil de la localidad de Carlandas (Teruel), localizó en una especie de cabaña a la niña y a su padre, y al parecer había otro hombre en el lugar.
En contra de lo que se dijo en principio, Jaime Cánaves no fue detenido, puesto que sobre él pesaba sólo una orden de localización, igual que para la menor. La abuela materna se desplazó el mismo día a Teruel con un familiar para recoger a la niña y el mismo fin de semana ya estaban de regreso a Manacor. Desde entonces se está pendiente de efectuar unas diligencias judiciales al respecto. Entre otras actuaciones está previsto que la menor comparezca ante la juez, y no se descarta que tampoco lo haga Jaime Cánaves.