Una banda internacional formada por ocho ciudadanos ecuatorianos ha sido desmantelada por la Guardia Civil de Palma, tras cometer al menos quince robos en peleterías y comercios, sobre todo de la comarca de Inca.
Las investigaciones se iniciaron a finales del mes de diciembre, cuando numerosos particulares interpusieron denuncias por robos en aquella localidad que, además, guardaban sospechosas similitudes. Los funcionarios de la Policía Judicial llegaron a la conclusión de que se trataba de los mismos delincuentes y montaron un dispositivo especial para interceptar a la banda. Días después la Benemérita detectó que algunos ecuatorianos habían alquilado pisos en Palma y el cerco se estrechó.
El pasado día 10, una de las detenidas, M.E.M.V., de 24 años, fue sorprendida cuando se disponía a cometer un robo en Inca. A partir de ese momento se sucedieron los arrestos y, uno a uno, fueron 'cayendo' los ecuatorianos: F.M.A.B., de 28 años, C.E.S.M., de 33, F.P.M.D., de 38, A.L.Z.O., de 28, y otros tres sospechosos cuyas edades no han sido facilitadas. El juez encargado del caso autorizó los correspondientes registros domiciliarios, que fueron positivos.
En las casas alquiladas se encontraron chaquetas de piel, anoraks, prendas de lencería, pantalones y juguetes de la marca Walt Disney. El valor de la ropa recuperada asciende a 12.000.000 de pesetas y hasta el momento se han podido esclarecer quince robos, la mayoría en Inca. La organización de ecuatorianos buscada pieles de primera calidad, que luego exportaba de forma ilegal a su país. La Benemérita informó ayer que algunos de estos envíos fue de hasta 300 kilos de ropa, lo que hace una idea de la 'voracidad' delictiva de los ecuatorianos.